Books

Ya que estoy en este país me gustaría leer algunos de los clásicos en lengua inglesa, por lo que hace unos dias fui a comprar libros al centro, a buscar algo que me llamase la atención.

Las pasadas navidades había comprado "El guardian entre el centeno" en inglés porque varia gente me lo había recomendado. Estaba en Madrid y ese dia tuve suerte.



También había encontrado la "metafísica de los tubos", libro que una de mis relaciones-relámpago me tenía que regalar pero que me dejó antes de hacerlo. Al parecer era bien avariciosa la chica en cuestión, la odio mucho. La odio no por dejarme, sino por hacerlo antes de regalarme el libro. Yo le había regalado unos dias antes "Memorial do convento". Incluso le regalé un diccionario español-portugués!



Lo malo fue que ese mismo día, el día que compré los libros, coincidí con unos amigos y acabé regalando los libros a Mireia y a Lansbury. No sé si los habrán leído. Y bueno, hasta esta semana no he vuelto a tener en mis manos el "guardián entre el centeno". Esta vez creo que no se me va a escapar.

Independientemente de esto, yo quería hablar de otro libro ("yo he venido a hablar de mi libro, cojones!"). De hecho, se trata de una colección, de una colección de capa, espada y magia al más puro estilo.

Y no de una colección cualquiera, se trata de LA colección: "Crónicas de la Dragonlance". Son tres libros a los que me enganché cuando tenía quince años, diría. Me enganché muchísimo y no sólo me leí esos tres tochos, sino secuelas, prequelas y especiales. Todo lo que el márketing dio de si. Si hubiesen publicado cartones de cereales los hubiese leído también. Y coleccionado en fundas que resistiesen el paso de los siglos.



Tanto me los leí (y releí) que mis padres se preocuparon, con razón, y decidieron que lo mejor era motivarme con un siguiente paso literario. Todo esto lo supuse más tarde y nunca lo he confirmado, pero acertaron al no intentarme avanzar demasiado rápidamente (no iba a pasarme a Arthur Conan Doyle o Eduardo Mendoza así de golpe y porrazo). Sin salirme de la fantasía, un verano me ralagaron "Dune". Y eso sí que fue un flechazo.



Pero me estoy yendo por las ramas. Lo que venía a decir es que estaba yo echando una ojeada en la biblioteca cuando me encontré con la edición especial de coleccionista con los tres libros de la colección Dragonlance editados en un único tomo, con una ilustración pésima en portada, que no pude evitar comprar. Dudé al principio sobre qué libro debería empezar a leer, pero al final estoy releyendo un clásico de mi pubertad, esta vez en inglés, aunqe así tengo la excusa de que me sirve para el idioma (todos estamos de acuerdo en lo importante que es saber decir "encantamiento" o "elfo" en inglés).

Claro está que ahora que lo estoy redescubriendo me parece una soberana mierda y es de lo más obvio. Pero aún así me fascina y estoy, de nuevo, enganchadísimo. Si se enteran mis padres me matan! Con lo que les costó sacarme del atolladero...